miércoles, 13 de mayo de 2009
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Guía indispensable para manejarse en este blog
El blog sirve para descargar en él ocurrencias y darlas al aire, al éter, a la red, al universo, cualquiera sabe a quién. En ese espacio enigmático caen como semillas y son por ello aptas para germinar, a la búsqueda como están de la fecundación. Lo importante es la descarga, la liberación de la presión de los propios pensamientos. El blog tiene una función depurativa, acaso parecida a la del laxante.Aquí, en este blog, que nace al hilo de mi campaña electoral como aspirante a ocupar un escaño en el Parlamento europeo, no voy a hablar de política.
Quien quiera saber lo que pienso tiene ocasiones de leerlo en la página de UPyD, partido político por el que me presento, un lugar donde se da cumplida noticia de mis intervenciones públicas, conferencias, entrevistas y demás. También tengo la esperanza de que, al menos algunos periódicos nacionales y regionales y otros medios de comunicación, acojan mis manifestaciones.
Por estas razones, el espacio del blog lo reservo para otro fin. En él voy a comentar sucedidos de la vida cotidiana con espíritu festivo y burlón y hacer de ellos broma inofensiva, puro donaire, aunque el fondo del asunto a veces sea serio y obligue al lector a pensar por breves segundos. Pero, en general, mis líneas aspiran a ser pura burbuja, leve espuma. Estarán más cerca de la chispa que de la llama, serán más pavesa que hoguera. Más rocío que lluvia.
Una especie de ranura por la que se trata de llenar la hucha de la imaginación, por lo que convivirán la libertad con la obstinación en resaltar lo que no se resalta, en dar relieve a la contradicción, en realzar lo que de pintado hay en la sociedad.
También incluiré algunas “guindas en aguardiente” que es un género cercano a la greguería que cultivo desde hace años. Mis guindas son -no podían ser de otra manera- frutos redondos, algo ácidos, que, cuando se les da durante una temporada la compañía del aguardiente, adquieren un sabor rascón, picantillo, caústico, sin dejar por ello de ser al tiempo dulces y convincentes. Aspiran a mezclar lo punzante con lo amable, lo intemperante con lo cortés. Mi guinda pasa bien por la garganta y no daña al estómago.
Es más: actúa de carminativo pues que ayuda a liberarnos de las flatulencias que produce el estereotipo.
Creo que, tras lo dicho, el lector está en condiciones ahora de abrir despacio la botella que representa este blog, degustar las ocurrencias que en él se contengan y aceptar, complacido e indulgente, las cosquillas que perciba
Quien quiera saber lo que pienso tiene ocasiones de leerlo en la página de UPyD, partido político por el que me presento, un lugar donde se da cumplida noticia de mis intervenciones públicas, conferencias, entrevistas y demás. También tengo la esperanza de que, al menos algunos periódicos nacionales y regionales y otros medios de comunicación, acojan mis manifestaciones.
Por estas razones, el espacio del blog lo reservo para otro fin. En él voy a comentar sucedidos de la vida cotidiana con espíritu festivo y burlón y hacer de ellos broma inofensiva, puro donaire, aunque el fondo del asunto a veces sea serio y obligue al lector a pensar por breves segundos. Pero, en general, mis líneas aspiran a ser pura burbuja, leve espuma. Estarán más cerca de la chispa que de la llama, serán más pavesa que hoguera. Más rocío que lluvia.
Una especie de ranura por la que se trata de llenar la hucha de la imaginación, por lo que convivirán la libertad con la obstinación en resaltar lo que no se resalta, en dar relieve a la contradicción, en realzar lo que de pintado hay en la sociedad.
También incluiré algunas “guindas en aguardiente” que es un género cercano a la greguería que cultivo desde hace años. Mis guindas son -no podían ser de otra manera- frutos redondos, algo ácidos, que, cuando se les da durante una temporada la compañía del aguardiente, adquieren un sabor rascón, picantillo, caústico, sin dejar por ello de ser al tiempo dulces y convincentes. Aspiran a mezclar lo punzante con lo amable, lo intemperante con lo cortés. Mi guinda pasa bien por la garganta y no daña al estómago.
Es más: actúa de carminativo pues que ayuda a liberarnos de las flatulencias que produce el estereotipo.
Creo que, tras lo dicho, el lector está en condiciones ahora de abrir despacio la botella que representa este blog, degustar las ocurrencias que en él se contengan y aceptar, complacido e indulgente, las cosquillas que perciba
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UF! ésta pica.
ResponderEliminarDele mi enhorabuena a la celebridad, que el autodominio es una virtud complicadísima de cultivar, muy sacrificada y que cuenta con pocos modelos que seguir en la actualidad.
¿Por la boca muere o vive el pez?
¿Es la reputación incompatible con la expresión libre?.
Buena guinda, inalcanzable para algunos deslenguados cómo yo... pero ¡¿qué mas da?!, no somos celebridades.
Pero señorita Paraula ¿No se da cuenta de la doble intención con que está lanzada esta guinda? La tal celebridad era un bujarrón de los de bata y estola, y la contención de la pluma se refiere a lo recatado que anduvo siempre en su vocación de muerdealmohadas, de suerte que sólo se desbravaba los jueves por la noche con un cachitas muy discreto que por 200 euracos le ponía mirando a Cuenca.
ResponderEliminarEn realidad el tipo era columnista del ABC, pero del ABC de antes, y era presidente de la "Asociación Cristiana para la Familia, la Moral, el Orden y otras cosas de mucha sustacia para la salvación del alma". Escribió algunos best sellers para la Editorial San Pablo como "El Camino de la continencia", "Deberes del Cristiano célibe", o "Perdona a tu pueblo, Señor". Tan sólo una vez estuvo en peligro de ser descubierto, cuando en la madrugada de un viernes fue ingresado de urgencia con un desgarro de 4 centímetros por el que le hubo de ser instalado un orto de PVC. Este incidente puso fin a las sesiones de alivio del jueves por la noche, el cachitas fue despedido, y en su lugar contrato a un transformista con el que, en absoluta intimidad, interpretaba a duo los grandes éxitos de la Piquer.
¡No entiendo como no lo ha visto usted, doña Bárbara! ¡Si estaba clarísimo!
Cielo santo! que perspicacia tan infinita tenéis todos! jajaja! que interesante desde esta otra respectiva resulta ahora la guinda. Y ¿que tengo que hacer? ¿disculparme por ignorante? Ni por asomo está entre los haberes de mi sabiduría las plumas célebres de la iglesia católica.
ResponderEliminarPero no digáis que no había hecho yo una interpretación la mar de distinta, retorcida y bella de la guinda..... Creo que la próxima vez escucharé primero y luego hablaré ¿veis? si hubiera contenido mi pluma no habría arruinado mi reputación y parecería que sé de algo.... jejeje.
Don Apóstata
ResponderEliminarMuy divertido su post, sacando el doble sentido de la guinda de hoy.
Pero admirada Bárbara, en los tiempos que corren no tiene mucho sentido que un intelectual se recate cuando lo que se lleva precisamente es el exabrupto literario y el eructo televisivo. Hoy en día para mantener el prestigio es indispensable que le pillen a uno dándose el lote con la Veneno o pregonando la singularidad nacional del Valle del Jerte. Son tiempos de destemplanza y desorden donde contenerse la lengua es sinónimo de mediocridad y cobardía. Hay que escribir indecencias y falacias aunque se incurra de lleno en la "urdacia" de tener luego que arrancar a cuajo 40 páginas. No le quepa duda de que a día de hoy un lamparón de mayonesa es una obra de arte y un pedo un magistral discurso político. ¡Desléngüese sin temor, querida Paraula! Que la victoria es de los audaces y estudiar es para gorditos con tiempo de sobra para arruinarse la vista. ¡Oh tiempos! ¡Oh costumbres! ¡Para esto ganaron una guerra aquellos cabrones!
ResponderEliminarQue contradictorio, le leía hacer un par de guindas observar cómo ciertas estructuras estaban cosechado su éxito expedientando debates, libre expresión y pareceres distintos... y seguro que esos de abajo, que callan y acatan, son los que triunfan, los que miran con buenos ojos sus mencionados arribistas
ResponderEliminarTambién puede suceder que se termine la tinta, en ése caso la Celebridad ya ha dicho todo lo que tenia para decir, y claro, plaf ¡se acabó!.
ResponderEliminarPero eso, mi estimada Paraula, no son celebridades sino todo lo contrario. Los arribistas que se han incrustado en las estructuras de la UPyD son medianías desprovistas de todo talento que aspiran a la redención laboral por medio de alguna concejalía sobrevenida del cielo. Seres oscuros, tan faltos de talento como de escrúpulo y tan huérfanos de Salamanca como de Natura, que cifran toda su esperanza en ser capataces políticos de por vida a golpe de pito, gorra y brazalete.
ResponderEliminarLuego ya sí, acomodados sobre este lecho de abyectos y serviles mayordomos, se repanchingan los Gorriaranes a modo de soberbia crema cafetera. Y a estos si se les permite dárselas de cerebrones, gastando tinta y saliba por arrobas en confeccionarse un nombrecito. Lea, lea usted a Don Carlitos ya verá lo relisto que nos ha salido. ¡Y como maneja los precetos! ¡Y que caletre más aprovechao que tiene el gachó! Que uno le mira a la cara y no lo parece, pero es abrir él la boca y sube el pan de lo resabiado y filofero que nos ha salido. ¡Menudo prenda ha ganado la política española con ínfulas de agitador civil y alma de falangista! El híbrido perfecto, mireusté doña Barabarita, pulcro mozo por demás de puertas para fuera y un atila del expediente de puertas para adentro.
No confunda amiga mía, no confunda. Es a los de siempre a los que se nos pide silencio, obediencia y alegría en el agitar de banderas. A los otros, a los "Padres Fundadores" con vocación de cónsules vitalicios se les aplauden los excesos como grandes virtudes, y hasta se espera de ellos que se hagan de su cuerpo sobre los principios democráticos más elementales.
Pues es que me parece un poco infumable de leer, yo no tengo excesiva paciencia con la lectura, lo que no me gusta no me lo trago que la vida es corta. casi que prefiero creerle a usted, apostata, que ya le he cogido aprecio, y al menos me divierto leyéndole. Venga va, me animaré con una lectura corta ¿Que me recomendaría?, ¿su última entrada al blog? Anda que no tiene guasa si la realidad del partido es cómo usted la cuenta, lo de la selección negativa en la elección de candidatos. Me leería ese libro de movimientos sociales que ahí seguro que le veo el plumero del todo.
ResponderEliminarLas infulas de los padres fundadores son siempre un clásico. A menudo se olvida que una organización está al servicio de su misión, que es mucho más amplia que las mentes que la redactaron.
Y a tí no te va a cambiar nadie, sobre eso acepto apuestas.
En cualquier caso le dejé una pregunta parlamentaria en el blog, por si tuviera un tiempito de aclarme cuales son las herramientas que utiliza upd para promocionar candidatos válidos.
ResponderEliminarPor cierto, que el profesor no quería que este blog fuese de política, jajaja, flaco favor le estamos haciendo.
Los años me cambian, amiga Bárbara, los años. Respecto a las herramientas de UPyD para promocionar candidatos válidos, pues mire, de momento por designación digital (osea a dedo) y según el criterio del Consejo Directivo, que es algo así como la Jefatura Del Movimiento, y que amenaza con sucederse a si mismo hasta la extenuación (no sabemos si de la militancia o de ellos mismos) merced a un sistema de voto censitario y listas cerradas. Vamos que estos van a regenerar el sistema democrático por los co...
ResponderEliminarPero no se preocupe usted por lo de emborronarle políticamente el blog al señor Sosa. Si mira al margen derecho de los 28 seguidores 25 son miembros activos de UPyD. Lo quiera o no nuestro querido profesor, este es un blog político aunque se hable de fútbol, porque su autor es un personaje vinculado publica y profesionalmente a la política, y su promoción viene dada por una campaña electoral de un determinado partido político. Todos los enlaces que dirigen a esta página proceden de espacios políticos, y todos los enlaces que hay en la página dirigen espacios políticos. ¿Blanco y en botella? Horchata. De manera que denos el anfitrión las guindas que nosotros las sazonaremos con aquello que mejor nos venga en gana. Salvo que acaben por meter la tijera como en el resto de espacios relacionados con UPyD y sólo dejen hacer comentarios del tipo "que buena tarde se está quedando".
Un saludo.
Apostata:
ResponderEliminarA usted no se le acaba la tinta, es creador y buen escritor. Seguro que tiene razón, pero quizás porque todo sobre lo que se pueda hablar está relacionado de algún modo con la politica. Todo lo que es humano (hasta la felicidad), puede tener un angulo y un reflejo en la politica. Y claro el Profesor lo sabe y por éso habla del vino clarete, sabiendo que tambien tiene un angulo comercial, un angulo de Tiempo Libre y algo de relación con le mundo de la Droga.¿Puede ser?.
¡Pues vaya por los dioses!
ResponderEliminarDon Apóstata, ¿le importaría ser un poco menos feroz?.
Este blog era un alivio, después de los atracones de política, de ir a mesas, de conseguir firmas.
Parecía un lugar amable, donde olvidarnos un poco de UPyD, aún sabiendo que la inmensa mayor parte de los que entramos, estamos involucrados de alguna manera en el proyecto.
Un sitio donde sacar punta a los comentarios, donde reírnos de todo y de todos, donde poder admitir que no nos guste la poesía, o que somos forofos de Peret, o cualquier otra cosa poco correcta política y estéticamente.
Ya sé que solo soy una viejecita, sin currículo, sin ningún pasado glorioso ni epatante, y que le importa un pimiento mi opinión, pero a mí sí me importa, porque yo aquí disfrutaba, y ahora siento como si no tuviera derecho a decir nada, ni siquiera a entrar . Me ha chafado usted un placer. Y a mis años, van quedando pocos.
Apostata
ResponderEliminarLa Grandeza de la Libertad está en poder opinar. La Grandeza de nuestro profesor es no utilizar la censura,¿porque?, pues puede ser sencillamente porque la palabras tienen significados y junto con los significados van cargadas con mayor omenor verdad y con mayor o menor razón. Po eso sucede que algunos discursos si se les deja ir solos libremente llega un monento que se quedan sin gasolina y se paran. Pero para ésos casos nuestro profesor prepara una botella de rico licor de guindas.
Estimado Sake,
ResponderEliminarEn primer lugar gracias por el desmesurado elogio que me dedica, pero en cuestiones creativas un servidor no alcanza ni a juntaletras de regional preferente. Por lo demás, al respecto de que todo lo humano y lo divino ha de tener su necesario reflejo político, no puedo estar más en desacuerdo con usted. Más bien son los políticos los que se obstinan en politizar los detalles más íntimos y particulares de la vida, aspirando a regularlo todo de tal manera que hasta la forma de copular de cada prójimo acabe cotizando en urnas.
Por ponerle un ejemplo, yo vivo en Cataluña, donde los hábitos más insignificantes y cotidianos están codificados según su rango de validez autóctona. De suerte que hay maneras más catalanas que otras de afeitarse la patilla, de tomar el café o de sentarse a leer la prensa. Aquí, todo tiene su pegatina reivindicativa, y ni un trailer de 24 toneladas le daría a usted para colocarlas todas: selecciones deportivas, jumentos nativos, escarnio de la lengua impropia, reformulaciones históricas… absolutamente todo tiene su logo correspondiente, y los poderes públicos trabajan firmemente para que la simple omisión de gestos, estéticas y actitudes puramente catalanas sea considerada un imperdonable delito de lesa patria.
Pero este tipo de politización de lo cotidiano no es exclusiva del catalanismo. Cualquier partido político que se precie tiene redactada una larga lista de hábitos, reivindicaciones y posicionamientos estéticos que ha de ser suscrita íntegramente, so pena de ser calificado como un vulgar seguidista de la formación adversaria. De esta manera, ni cabe que un socialista albergue la menor duda sobre la progresía del aborto, ni es de recibo que un popular llegue a plantearse la legitimidad de la eutanasia. Según lo veo, amigo Sake, llevamos camino de convertir la sencillez y la espontaneidad de nuestra vida cotidiana en una parada militar repleta de símbolos y pegatinas, hasta el punto de que pronto desfilaremos por las calles con el estandarte de “los nuestros” a la peor manera de los orangistas irlandeses.
Un saludo
Hola viejecita,
¿Y yo que le voy hacer? Malo sería tener que agradar a todos todo el tiempo. Siempre puede dejar de leer mis comentarios o, si le sirve de consuelo, ya tiene un culpable al que achacar las malas vibraciones.
Don Apóstata
ResponderEliminar¡Es que sus comentarios son divertidísimos!. Hasta que te encuentras con la dentellada, en lo más frondoso.
Solo le pedía que fuese un poco menos feroz. No que cambiase de opinión, ni de estilo.
Pero ¡que se le va a hacer! Seguro que si fuera una chica joven y guapa, no le importaría ponerse de vez en cuando guantes de terciopelo, o de cabritillo mismamente, pero claro, es la vida, así que me tendré que aguantar, y no provocar las iras de nadie.
Estimado Apostata
ResponderEliminarYa su nombre me agrada, por lo que de rebelde pueda representar. Yo he vivido en varios sitios, por lo que mi acento es irreconocible y mezclo torpemente expresiones de mi lugar de nacimiento con los otros lugares. Lo bonito esta en no estar uniformados y con la misma gorra. Lo interesante esta en lo diferente que podemos ser y sobre todo en compartir nuestra especie, La Humana. Eso nos hace posible disfrutar del licor de guindas y de otros placeres que compartimos en nuestra semejanza. Es tonteria decirle lo que sabe, que UPyD es tranversal y caben distintos pensamientos, no se lo dire y tampoco me extenderé más. Sólo saludarle y desearle lo mejor.
Yo me voy a dirigir a la viejecita,
ResponderEliminarque casi entiendo su postura porque en los últimos post hemos inundado su territorio. ¿Y porqué no tiene uste derecho a decir nada?. Yo, al menos, estoy encantada de leerla, de apreciar su fiel defensa y sus comentarios cariñosos y de reirme con usted, si me deja, y de admirar los post del profesor o de banalizar todo lo que queramos con las guindas (al igual que de ponernos serios, si se tercia en otras ocasiones). Lo que me extraña es que no se riera usted con la ocurrencia de la pasada guinda en la que Nuestro Feroz Apóstata se la imaginaba teniendo un delirio paranoico con el profesor, porque desde luego era una visión hilarante.
No se deje usted chafar el placer, nadie que comente aquí se merece eso...
Un abrazo.
Tiene razón Doña Bárbara Paraula;
ResponderEliminarAyer estuve toda la tarde pendiente del debate, sin sonido, pero sin descanso, y no vi el fabuloso comentario de Don Apóstata. Y esta mañana no me di cuenta de que había uno nuevo .
Me he reído muchísimo con el comentario sobre mi persona.
Aunque en general sea una viejecita comedida aunque cascarrabias, y esos delirios no sean nada de mi estilo.
Y este no es en absoluto mi territorio. ¡Estaría bonito!. Pero es un territorio donde me siento cómoda, y donde me parece que la gracia es que todos se sientan cómodos, aunque se les tome el pelo , o se les rete a duelo por un quítame allá esos versos.
Don Apóstata
ResponderEliminarReconozca que eso del "lecho de abyectos y serviles mayordomos" es bastante dentellada, para una persona que va a las mesas, consigue firmas, y trabaja todo lo que puede por un proyecto, el de UPyD, en el que ha puesto mucha ilusión.
Que no, que los de a pié no formamos ningún lecho cómodo para nadie. Que disentimos cuando no estamos de acuerdo, lo decimos en público, se nos contesta, y a veces, incluso se nos da la razón.
Pero querida viejecita, si más que dentelladas son chupetones cariñosos. Aunque vive dios que sobre su afirmación de que las doy en lo más frondoso no he logrado descifrar si se refiere usted a una localización geográfica o anatómica. Por otra parte le ruego que su provecta edad no le impida imaginar a un servidor, varón y de mediana edad, con guantes de cabritilla y hasta danzando los siete velos al ritmo de unos crótalos. No hay que ponerle freno a la fantasía, por más que en semejantes trazas me acaben por zozobrar varias décadas de heterosexualidad convencida. Por último, si usted conociese a los peranes, allós y garcías que en el mundo son entendería que lo de mayordomos serviles y abyectos era tan sólo un eufemismo.
ResponderEliminarEstimado sake, conozco de primera mano la transversalidad de UPyD, y es algo así como la transversalidad del futbolín, en donde los jugadores son atravesados por los costados para quedar solidariamente unidos a lo largo de una rígida barra. Como ya he dicho, suerte con el proyecto o con lo que queda de él, y espero que de la misma manera que yo no tengo nada en contra de quienes mantienen su fe intacta, tampoco haya nadie al que le parezca mal que servidor haya acabado apostasiando de semejante resurrección de la democrácia inorgánica.
A todos en general les propongo un pacto: no me tiren más de la lengua y me abstendré de desarrollar la miseria ética, intelectual y política que he conocido en mi breve paso por el partido. Al fin y al cabo ya he dicho que pienso votar al señor Sosa, y en eso al menos andamos todos de acuerdo ¿o tampoco?
Bueno Don Apóstata, pues prometo evitar el tema de UPyD, y no pretender que reniegue de su apostasía.
ResponderEliminarEn cuanto a los guantes de cabritilla, tengo en casa algunos que pertenecieron a mi bisabuelo, que era un señor con toda la barba, y que ese sí se batía en duelo con una facilidad pasmosa. (También levantaba pesas, y nadie le hubiera podido imaginar bailando la danza de los siete velos, crótalos o no crótalos).
Y me alegro infinito de no conocer de nada a esos personajes a los que alude.
Buenas noches.
Pues mire, yo no le prometo no tirarle de la lengua, no pienso ahogar su lucidez, que sin duda está un tanto rabiosa y decepcionada, cómo usted mismo reconoce, y a causa de eso, bueno pues puede resultar pelín agresiva con otros pensamientos. Pero tampoco voy a enredar más, si saliese, sale.....
ResponderEliminarLo que si me encantaría es ver al menos un foto suya con guantes de cabritillo moviendo sus caderitas a ritmo de crótalos... jajajaja. ¡Pónganos una prueba a cambio de esa foto!, ¡pónganosla que hago lo que sea!.
Pensando en relajarnos de la política, me gustaría compartir con vosotros, una canción popular que no sale de pluma ninguna, sino de la garganta de los mayores:
ResponderEliminarEspaña tiene terrenos mejores que los de Cuba
en España se cría la uva,
trigo, cebada y centeno.
Tabaco no lo tenemos
porque criar no lo dejan,
tenemos cabras y ovejas,
minas de plata y oro.
Español, ¿a quien te quejas?,
¡¡si España vale un tesoro!!.
Ahí queda eso.
Pues si me permite usted una versión libre:
ResponderEliminarDespués de lo del Maine perdiose Cuba
y allí se nos quedó hacienda y terreno
que puso al catalán de mala uva
y a todo lo español se volvió ajeno.
Desde ese día en todo se nos quejan,
sin tino, sin vergüenza y sin decoro,
diciendo que se marchan, que nos dejan,
pues no hay para ellos patria si no hay oro.
¡vaya!, apóstata, luego dices que no todo debe politizarse, ¡y anda que has tardado en aprovechar una canción!, jajaja. En fín, algún día me gustaría leerte la doctrina entera de lo catalán, lo nacionalista, la patría y su unidad, que igual hasta hacía conato de discutirte.
ResponderEliminarSiento decepcionarla, querida Paraula, pero yo soy más de chascarrillo que de doctrina, y bastante más de barrio que de patria. Y en lo de discutirme, si lo hace por afición bien esté, pero, si no tiene un especial interés, limítese a esperar un par de días y verá como yo mismo me discuto.
ResponderEliminarjajaja, le creo, le creo en eso de que en unos días usted mismo se dicute.
ResponderEliminarEn fín, me leeré la doctrina general, no hay más que buscarla en ese pequeñitooooo programa general..... esperaba hacerlo más ameno.